Se trata de conocer la situación de partida de la empresa en su funcionamiento interno, revisando los diferentes procesos que se llevan a cabo, la distribución de funciones y responsabilidades de los puestos de trabajo, los flujos de información disponibles, … para evaluar posibles deficiencias e identificar áreas de mejora. Las conclusiones de este estudio se recogen en un informe completo desglosado por procesos operativos y de apoyo.

Paralelamente se establecerá un plan de acción de mejoras para optimizar el sistema organizativo. La programación en el tiempo de las medidas de mejora se establece en función de su prioridad por el grado de impacto que generen en la empresa, la necesaria secuenciación de acciones relacionadas y el diseñar un calendario de trabajo realista por los recursos disponibles para su implementación.

El informe y el plan de acción se presenta a la Dirección y Responsables de área en una reunión de trabajo para su discusión y validación.

Beneficios

  • Revisión en profundidad del sistema organizativo; participación de todos los puestos de trabajo clave.
  • Importante batería de mejoras; se identifican un número considerable de mejoras en muy poco tiempo.
  • Enfoque a la optimización de los procesos críticos. Procesos donde se concentran muchos recursos, son complejos de gestionar, intervienen diferentes agentes de la organización, aportan un valor añadido significativo, …
  • Propuestas de mejora en diferentes ámbitos: mejoras en la coordinación y comunicación interna, reasignación de funciones, reingeniería de procesos, puesta en marcha de indicadores de gestión, cambios en organigrama funcional, diseño de procesos para el control interno, planificación de actividades, …

Herramientas

  • Análisis del valor del cliente (VSM)
  • Análisis de datos y estadísticas
  • Entrevistas personales
  • Observación del trabajo “in situ”
  • Trabajo en grupo para revisión de informes

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